jueves, 19 de agosto de 2010

Más madera: Oye, lee y ya van 1.000


Al final, este agosto que se aventuraba tan plomizo lo está siendo más o menos, pero el tedio me ha servido para devorar unos cuantos libros y descubrir nuevas músicas, casi como en aquellos años en los que sólo me dedicaba a eso, a luchar por ser el primero en saberlo todo. Craso error, por cierto: sudes lo que sudes, siempre hay alguien que se te adelanta en la escalera hacia el oráculo.
1. Creo que ya hablé aquí de Cold Spring Harbour, de Richard Yates (RBA), pero vuelvo a hacerlo porque me reafirmo en su excelencia. Brutal. También recomiendo Caín, de Saramago (Alfaguara), a quien tenía olvidado hasta que su muerte lo empujó de nuevo a la primera fila de la estantería. Es raro y pierde fuelle según pasas las páginas, pero descoloca y provoca sonrisas, que no está mal. Lo mismo con Formas del amor, de David Garnett, publicado en una de mis editoriales favoritas, Periférica: un poco folletinesco, ok, pero agradable si buscas soñar con un tierno verano de lujurias y azoteas.
Casi se me olvida: entre medias cayó en mis manos La contadora de películas, una pequeña gran joya de Hernán Rivera (Alfaguara) que me ha fascinado. Y que, de nuevo, me ha dado confianza en lo bien que pueden funcionar las novelitas breves, como la que he escrito yo (200 páginas a doble espacio por una cara), que sigue sin encuadernación a la espera de nuevo aviso. (Por favor, que me digan algo YA).

2. Con la música me pasa que en los (largos) ratos de sopor laboral me ha dado por recuperar viejas costumbres y ahora acabo de empaparme de decadencia pop con La Bien Querida. Sé que tenía que haberlo hecho el año pasado, pero ya digo que se me pasó el arroz para mantener ciertas rutinas. Nunca es tarde. Por lo demás, soy "neofan" de Autokratz (Always Love es un temazo y yo sin saberlo), de Northern Portrait, de poder entrevistar la próxima semana a Isobel Campbell (todo lo que canta me en-canta), del último de Charlotte Gainsbourg que robé ayer (IRM se llama) ) y tengo pendiente de que me guste (o no) el de Coque Malla, robado ayer también. Y si robo es porque yo prefiero los cd's originales. Soy un romántico, ya.
Entre esto y el ashtanga-yoga, que despierta mi mente y desencaja mi cuerpo tres días a la semana, se me pasan los días un poco más volando; un poco menos reptando. Ahora ya sólo queda que llegue septiembre y podamos agitar las mentes sin temor a que se caliente la cerveza. Otra, por favor.

P.D.: Ya lo digo yo. He escrito un post facilón y recurrente para celebrar que ya llevo 1.000 visitas.
P.D.2: ¿Cómo se hace para tener un millón de seguidores, casi tantos como amigos en Facebook? Sospecho que esto no tiene tanto tirón como el cotilleo globalizado en la era 2.0. Ni de coña.
P.D.3: La de la foto es Isobel Campbell, que acaba de publicar Hawk junto a Mark Lanegan. Va en el coche porque ha quedado conmigo.

3 comentarios:

  1. Hay que saber sacar cosas buenas de las horas de tedio...

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  2. 1000 visitas y 1000 millones de kilometros desde los dias de 'El submarino amarillo' ;)
    Miki

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  3. SE comienza celebrando 1000 y nunca se sabe donde se puede acabar. Espero que lo proximo sea la celebracion del libro con un copichuela mediante.
    Besazos Chico de la Redacción

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